La historia de la infografía es muy breve. Hacia el año 1786
el escocés William Playfair comienza a utilizar los gráficos de barras y tortas
como una manera de facilitar la comprensión de los datos estadísticos.
Mas tarde utilizando tecnología y recursos gráficos, la
infografía irrumpe en las ediciones
periodísticas.
El periodismo norteamericano es el primero en utilizarla y
para ello emplea gráficos de mayor despliegue que faciliten la comprensión del
problema.
Sin embargo la infografía en nuestro país tendría otro
origen. A comienzos de los ´90 las áreas deportivas y de lectura distendida
[suplementos de fin de semana y revistas dominicales] son el escenario de este
nuevo lenguaje que se impone como modelo de lectura moderna: la posibilidad de
entender en un instante una cuestión que demandaría algunos minutos de lectura
y la posibilidad del icono reconocible inmediatamente.
Los diarios son los que capitalizarán este diseño de información,
pudiendo narrar un acontecimiento que no ha sido posible fotografiar pero del
cual se poseen datos para construirlo (un hecho bélico, un accidente de
tránsito, el asalto a un banco, etc). Además le necesidad de los medios
gráficos de obtener un mayor impacto visual por el desinterés creciente del
lector saturado de información.
La infografía comenzó en nuestro país a principios de los ´90. La comprensión de un hecho se desplazaba del registro textual al registro visual. Esta nueva narrativa, la de los “dibujitos” ordenados con determinado criterio, le confería a la página un aspecto totalmente nuevo, utilitario para unos, frívolo para otros, pero atractivo para la mayoría; y mientras esperaba un lugar estable dentro de la redacción, obtuvo y lo sigue haciendo año tras año, varios premios internacionales. A partir de allí todos los temas son infografiables.
Con el tiempo las revistas dominicales y los grandes diarios
lucirán gráficos “atemporales” de carácter ilustrativo, que no cumplen una
función informativa sino más bien distractiva, donde no importa tanto el leer
como el mirar.
La necesidad corporativa de sostener la venta de un diario,
encontró en la infografía la manera de aligerar el producto y hacerlo atractivo
visualmente, realizando un diario que no fuera necesariamente para leer.
Por lo tanto el oficio de infógrafo tiene un claro marco
profesional, códigos de trabajo, y las posibilidades de ejercerlo son
infinitas.
CARACTERÍSTICAS
- Título llamativo
- Poco texto
- Imagen principal
- Gráficos adicionales: mapas,
planos, fotos, barras
o tortas p/datos
estadísticos, línea de tiempo,
diagramas, etc.